Te explico cómo solucionarlos
Los hábitos de compra nocivos se acaban con estos 3 consejos:
- Focalízate en tu objetivo: comprar menos y ahorrar dinero. Es necesario invertir en calidad y no en cantidad. Mejor tener 3 camisetas de algodón 100% que duran muchos años y sientan mejor incluso al tacto, y no 10 camisetas económicas que después de 20 lavados pierden calidad.
- Saber qué colores y prendas te favorecen para no comprar en vano y acertar con lo que estás eligiendo. Todas las mujeres a las que he asesorado, todas, usaban los colores equivocados. Yo incluida cuando no conocía la asesoría de imagen.
- Entender por fin que irte de compras no es terapéutico.
Hace unos días leía un artículo en Forbes sobre los hábitos de compra de las mujeres, y lo encontré muy interesante porque sigo comprobando que el hábito de comprar por comprar sigue muy extendido, y más que antes.
Y seguramente, alguna vez, te habrás sentido tremendamente en culpa por haber gastado tanto y tanto en vano, o porque una vez en casa, has caído en la cuenta de que no era necesario comprar ese vestido.
Y ahora… ¿cuando me lo pongo?!?… bueno, para una boda… (pasan los años y nadie se ha casado…) ¡Los zapatos no combinan con ninguno de mis pantalones!!!
La solución para gastar menos, no son los descuentos ni las rebajas, sino comprar menos. Los descuentos y las rebajas son útiles si se utilizan con buen sentido. Y soy consciente de que éste no es el mensaje que recibes todos los días.
Los hábitos de compra nocivos: cómo acabar con ellos
Durante todo el año, nos bombardean de mensajes y publicidad poniéndonos la necesidad de comprar, consumir y gastar.
Hoy en día, hay mujeres que no solo llegan a tener 20 looks distintos, si no que todavía les sobra “por si las moscas…”, “por si adelgazo…”, “por si algún día me decido a usarlo…”.
Probablemente, si te reconoces en esta situación, quiere decir que estás gastando por gastar.
Seguramente todas tengamos que hacer recambio de prendas, está claro. Lo importante es comprar correctamente y de buena calidad. Comprar barato y de poca calidad cuesta caro y es una consecuencia de los hábitos de compra nocivos.
Cuando eres consciente y sabes qué es lo que necesitas comprar, eres más feliz ya que estás eligiendo bien y con cabeza, y además prendas que te gustan, te quedan bien y te hacen más atractiva. Guay, no?!?
Para terminar, me gustaría conocer tu opinión: ¿cuáles son tus hábitos de compra? ¿crees que estás gastando más de lo que deberías en ropa y calzado?
Un abrazo.
Jessica Ingrid.
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